La jornada de este lunes en el Senado estuvo marcada por un giro inesperado: la gravedad del estado de salud del senador Miguel Uribe Turbay obligó a la bancada del Centro Democrático a retirarse del debate de la reforma laboral.
La Fundación Santa Fe de Bogotá informó que el político fue intervenido de urgencia en la mañana y que su condición es “extremadamente crítica” y de “máxima gravedad”.
Uribe, quien también es precandidato presidencial, sufrió un atentado el pasado 7 de junio durante un acto de campaña en el occidente de Bogotá. Desde entonces permanece hospitalizado y, pese a los esfuerzos médicos, su pronóstico sigue siendo reservado.
La noticia sacudió a la plenaria. Mientras el senador Antonio Correa, del Partido de La U, propuso continuar con la discusión, los partidos del Pacto Histórico solicitaron visitar la clínica para expresar solidaridad con la familia.
A ellos se unieron senadores liberales como Miguel Ángel Pinto, Mauricio Gómez, Juan Pablo Gallo y Karina Espinosa, quienes también se ausentaron para acompañar a sus colegas del Centro Democrático.
Por su parte, el presidente del Senado, Efraín Cepeda, aclaró que la plenaria debe avanzar en los artículos que llegaron a un acuerdo en la subcomisión que se conformó la semana pasada y que no son polémicos, y evaluar si se levanta la sesión más adelante.