¿Cómo tomó Asofondos el fallo de la Corte Constitucional?
“Destacamos el hecho de que la Corte Constitucional se haya pronunciado antes de la entrada en vigencia que tenía la Ley 2381, porque pues así se evitan muchos problemas jurídicos y operativos. Ese es el primer punto. Lo segundo es que la reforma regresa al Congreso de la República para ser proyecto de ley. La Corte no solamente le da tiempos al Congreso, lo cual es importante por temas de certidumbre y por temas de planeación, sino que le da un punto de partida y es la proposición que hizo la representante Pizarro y otros para empezar de nuevo el debate en la plenaria de Cámara de Representantes.
Y además la Corte explica cómo después de que se perfeccione ese debate, también determina los tiempos de conciliación y dice que va a hacer un análisis definitivo sobre la constitucionalidad de la ley con posterioridad a ese proceso.
Entonces, ya queda claro cuál es el mapa. Estamos a la espera del auto, que va a dar muchos más detalles sobre esta decisión de la Corte Constitucional”.
El presidente Petro lo calificó como algo bueno, ¿coincide con esa lectura?
“Es bueno en la medida en que se genera un poco más de claridad jurídica con respecto al sistema pensional. Dependerá un poco de lo que pase en el debate de la plenaria de la Cámara. La reforma, pues la conocemos ya hace un año, y tiene características positivas, principalmente en el avance de los temas de equidad.
A nosotros siempre nos pareció que se queda muy corta en los temas de sostenibilidad tanto del sistema pensional como de sostenibilidad fiscal, también en temas de cobertura. La cobertura realmente no depende tanto del sistema pensional como del mercado laboral, de la capacidad de la economía, de que la gente participe en el mercado laboral, de que se generen empleos y de que esos empleos sean formales”.
¿Cuánto tiene la Cámara para decidir?
En ese orden, ¿cuándo entraría en vigencia?
“La reforma depende de cuándo la Corte Constitucional produzca el acto administrativo que le permita al Congreso iniciar la discusión. En la mañana de hoy (19 de junio) se está diciendo que la Corte Constitucional produciría eso durante la próxima semana, y el Gobierno llamaría a sesiones extraordinarias a partir de la próxima semana.
Hay un mes, entonces, si se convocan las sesiones extraordinarias es muy posible que la parte de discusión en la plenaria de la Cámara se surta en esas sesiones extraordinarias. Y la conciliación, si es necesaria, podría tener lugar a principios de la legislatura siguiente. Ya estamos en tiempos de la Corte Constitucional, quien hará la revisión definitiva. Esperamos que sea una cuestión de semanas, tal vez sea una cuestión de pocos meses para la entrada en vigencia”.
¿Agosto o septiembre, más o menos?
“No podría especular porque depende de los tiempos del Congreso, que no son ciertos, y depende de los tiempos de la Corte que tampoco son ciertos. Sin embargo, sí esperaríamos que a más tardar a finales del segundo semestre de este año o principios del año 2026 se pueda dar la entrada en vigencia de la reforma”.
¿Creen que en el debate que se hará puede mejorar la reforma en términos de sostenibilidad?
Esta reforma no tiene en cuenta un incremento en la edad de pensión, ¿debería el próximo presidente hacerlo?
“Las condiciones demográficas han hecho que sea muy importante discutir los temas que se denominan paramétricos en los sistemas de pensiones del mundo. Y Colombia no es la excepción. Va a ser muy importante en el corto plazo discutir no solamente la edad de pensión, sino las semanas cotizadas y muy probablemente la tasa de reemplazo que es el porcentaje del último salario que termina recibiendo la persona como pensión en el régimen de prima media.
Estos elementos harían que el sistema pensional fuera más sostenible. Entonces, llegar a acuerdos sobre estos parámetros va a ser muy importante y en Colombia vamos a tener que abrir esa discusión más temprano que tarde. En el mundo casi todas las jurisdicciones se están moviendo hacia los 65 años en este momento”.
¿Cuáles son los posibles escenarios para el futuro de la pensional, teniendo en cuenta que devolvieron a la Cámara?
“El país llegó a un consenso hace ya muchos años, de la necesidad de tener una reforma pensional. En los últimos dos años se ha discutido una propuesta del Gobierno Nacional que por supuesto tiene posibilidades de muchas mejoras. Dependerá un poco del análisis que haga la Cámara y del ambiente político que existe si hay cambios o si la reforma es exitosa en superar ese debate.
La realidad es que más allá no podemos hacer comentarios porque dependemos de ese escenario que todavía no está abierto”.
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Es posible incluso que se llegue a hundir...
“Es un debate, ¿no? Es nuevamente un proyecto de ley. Entonces, cuando se está discutiendo un proyecto de ley, por supuesto cualquiera de las opciones es posible”.
Pero, ¿consideran ustedes que un hundimiento de la reforma sería conveniente?
“Realmente el debate que se va a dar en el Congreso de la República tiene la posibilidad de producir cambios. La posibilidad de que la reforma no avance en el Congreso es baja.
Es cierto, los fondos hemos estado preparándonos para la medida, invirtiendo cuantiosos recurso y decenas de millones de dólares para estar listos para la implementación.
Nos gustaría tener un sistema pensional en el que la participación del sector privado sea más importante. Eso le conviene a la nación colombiana. Vamos a ver qué posibilidades hay de persuadir al Congreso de la República para que incluya esta clase de cambios”.
En caso de que se llegue a hundir, ¿qué pasaría con todo lo que se ha hecho con estos cambios? ¿Son vacíos que todavía hay?
“No, no, para nada. Hoy en día Colombia tiene un sistema pensional que ha funcionado, que por supuesto necesita de revisiones y de cambios, pero la Ley 100 lleva 30 años funcionando. Y hoy en día, mientras que no haya una nueva ley aprobada, tenemos el sistema pensional colombiano y seguimos trabajando con él hasta que sea posible reformarlo”.
