El presidente Gustavo Petro se refirió este lunes a la crisis diplomática y económica con Estados Unidos, y –al reivindicar que no es un mandatario “que calla y se arrodilla”–, defendió sus posturas y declaraciones contra el presidente Donald Trump. “Ya veré cómo maniobro”, dijo.
El mandatario, en entrevista con el periodista Daniel Coronell, aseguró que no le “asustan” las amenazas y que es un “sobreviviente que se mueve rápido”.
“El tono (contra Estados Unidos) fue subiendo en la medida en que fueron cayendo más bombas y matando más niños en Gaza, encadenando y esposando más a latinoamericanos y expulsándolos como perros”, señaló el jefe de Estado.
El jefe de Estado, quien apareció con un pin o sujetador de ropa con la bandera de guerra a muerte, alegó que los mismos misiles que estaban cayendo en Gaza ahora caen en el mar Caribe, a propósito de las operaciones de Estados Unidos contra narcotraficantes en inmediaciones de Venezuela.
“Van 27 latinoamericanos que nunca debieron matar porque está prohibido por el orden internacional ese tipo de desproporción de la fuerza, que es crimen de guerra, es una excusa para invadir Venezuela porque se quieren quedar con el petróleo”, sostuvo el jefe de Estado.
En ese contexto, se refirió a su actuación del pasado 26 de septiembre cuando, en medio de la Asamblea General de Naciones Unidas, le pidió a los soldados de EE. UU. desde una calle en Nueva York que “desobedezcan la orden de Trump” sobre Gaza.
Si bien el jefe de Estado dijo textualmente que “desobedezcan” a su presidente, durante la entrevista otra su lectura. “El mensaje no es desobedezcan a su presidente. El mensaje es ningún soldado del mundo, ni colombiano, ni europeo, ni africano, ni norteamericano, estadounidense, puede cumplir una orden que sea disparar contra la humanidad y cometer un crimen contra la humanidad, porque es el peor delito del mundo”.
Según Petro, “no se puede obedecer a un tirano, ni a una tiranía”. Por ello, defendió que cuando hay un crimen contra la humanidad “desobedecer es un derecho”.