El consumo de café instantáneo podría aumentar significativamente el riesgo de padecer degeneración macular relacionada con la edad (AMD, por sus siglas en inglés), una de las principales causas de pérdida irreversible de la visión central en adultos mayores. Así lo indica un estudio publicado en junio de 2025 en la revista Food Science & Nutrition, que utilizó herramientas de análisis genético para investigar el posible vínculo causal.
La degeneración macular es una enfermedad progresiva que afecta la mácula, una zona central de la retina que permite la visión nítida y detallada. Gracias a la mácula podemos leer, reconocer rostros y distinguir objetos con precisión. Su deterioro conduce a la pérdida de visión central, aunque se conserva la periférica.
El equipo de investigación, conformado por científicos de universidades en China, aplicó métodos de randomización mendeliana, correlación genética y análisis de colocalización a datos de más de 180.000 personas en relación con el consumo de diferentes tipos de café, y más de 300.000 individuos respecto a casos y controles de AMD.
Los resultados mostraron que solo el café instantáneo se asoció con un mayor riesgo de AMD seca: por cada aumento de una desviación estándar en su consumo, el riesgo aumentaba hasta 6,92 veces.
La diferencia está en cómo se hace el café
Los investigadores no encontraron variantes genéticas compartidas entre el café instantáneo y la AMD, lo que sugiere que la relación no está mediada por un solo gen, sino por una combinación de factores ambientales y biológicos. Una posible explicación estaría en el proceso de producción del café instantáneo, que implica temperaturas muy altas y concentraciones elevadas.
Este tipo de procesamiento genera sustancias potencialmente perjudiciales, como la acrilamida y los productos finales de glicación avanzada (AGEs, por sus siglas en inglés).
Los AGEs son compuestos formados por la reacción no enzimática entre azúcares reductores y proteínas o lípidos, conocida como reacción de Maillard. Esta ocurre tanto dentro del cuerpo como en los alimentos sometidos a altas temperaturas, como es el caso del café instantáneo.
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Estos compuestos pueden inducir estrés oxidativo, inflamación y disfunción celular en la retina, factores directamente implicados en la progresión de la AMD.
Estudios previos citados por los autores ya habían vinculado los AGEs con daños en la barrera hemato-retiniana, producción de especies reactivas de oxígeno (ROS), y activación de rutas moleculares que llevan a la muerte celular o inflamación crónica.
Expertos recomiendan
Dado que el estudio confirma una asociación genética robusta, los autores recomiendan que personas con alto riesgo de AMD, por antecedentes familiares o factores genéticos, eviten o limiten el consumo de café instantáneo. Además, proponen que este tipo de hallazgos abran el camino a estrategias de prevención más personalizadas, basadas en perfiles genómicos.
También llaman a la industria alimentaria a considerar la reducción de compuestos nocivos generados durante el procesamiento de alimentos, y a realizar más investigaciones que analicen otras posibles conexiones entre el café instantáneo y enfermedades relacionadas con el envejecimiento.