En una acción de las tropas del Ejército Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), frustraron un atentado con explosivos que estaba siendo preparado en la vereda La Espriella, zona rural del municipio de Tumaco, Nariño.
Durante la operación, enmarcada en el Plan de Campaña Ayacucho Plus, las autoridades hallaron 117 cilindros de gas propano ocultos en dos depósitos clandestinos. Estos elementos, avaluados en más de 104 millones de pesos, serían transformados en artefactos explosivos improvisados por el grupo armado residual Iván Ríos, facción de la autodenominada Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano (CNEB).
Un civil fue hallado custodiando el material explosivo. Sin embargo, diez minutos después de la redada, cerca de 100 personas impidieron que la Fiscalía completara las respectivas capturas. Las tropas lograron retomar el control del área sin registrar heridos ni enfrentamientos.
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¿Quiénes están detrás del atentado frustrado?
La CNEB es una organización armada residual que agrupa a estructuras disidentes de las extintas Farc, activas en los departamentos de Nariño y Putumayo. Este hallazgo representa un golpe directo a sus capacidades logísticas y financieras, debilitando su accionar violento en la región.
El teniente coronel Fabián Triviño Quintero, comandante del Batallón de Selva N.° 53, señaló que esta no es la primera vez que estructuras armadas ilegales movilizan población civil para evitar acciones de la Fuerza Pública.
Lo particular, es que el 1 de julio, como resultado de las negociaciones en la Mesa de Diálogos de Paz entre el Gobierno Nacional y la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano (CNEB), se estableció una inversión de 8.000 millones de pesos destinada a reemplazar mil hectáreas de cultivos de coca con mil hectáreas de cacao en Tumaco y Roberto Payán, Nariño.
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En estas reuniones, ambas delegaciones ratificaron su apoyo al programa “Renacemos por la paz” y su compromiso con la transformación territorial de Putumayo y Nariño.
La iniciativa busca facilitar la transición de este grupo armado hacia actividades económicas legales, promoviendo la sustitución de cultivos ilícitos, el desarrollo regional y la reincorporación de sus miembros a la vida civil.
Al finalizar las sesiones, las partes suscribieron el Acuerdo 11, cuyo primer punto establece la sustitución de 7.500 hectáreas de coca en los municipios mencionados, reservando mil hectáreas específicamente para el cultivo de cacao.
La situación de Tumaco, Nariño y la paz
A pesar de los constantes hechos de violencia, en Nariño avanzan diálogos entre el Gobierno Nacional y grupos armados que han manifestado su voluntad de dejar las armas. En particular, con los Comuneros del Sur (disidencia del ELN) y con la propia Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano.
Hace apenas unas semanas, el Gobierno anunció la creación de zonas de ubicación temporal para 120 combatientes de la CNEB dispuestos a transitar hacia la legalidad. En paralelo, los Comuneros del Sur entregaron más de 585 artefactos explosivos, un gesto simbólico al que incluso asistió el presidente Gustavo Petro.