Ya se sabe que el Valle de Aburrá presenta microclimas, que la ubicación geográfica y algunas condiciones meteorológicas causan una variabilidad de eventos de un municipio a otro, incluso entre sectores. Pero lo de este viernes 25 de julio solo parece explicarse con una reacción coloquial: qué berraco clima tan raro.
Al mediodía y el inicio de la tarde de este viernes, el sur del Valle de Aburrá, en municipios como Caldas, Sabaneta y Envigado, así como en barrios de Medellín como El Poblado y Guayabal cayó un verdadero chaparrón con vientos extremos y tormenta eléctrica que dejaron afectaciones en algunos puntos y susto entre miles de ciudadanos.
Según reportó el Dagrd, en el barrio Manila, en El Poblado, colapsó un muro en una obra en construcción que cayó sobre edificaciones vecinas, afectando a ocho de ellas. En minutos hizo presencia el personal de emergencias, con tres tripulaciones de bomberos y personal del Dagrd, además de cinco ambulancias de la secretaría de Salud. Ocho personas resultaron heridas y, por ahora, se desconoce su estado de salud.
Se esperan nuevos reportes de daños por parte del Dagrd, en otros puntos de Medellín, por la ferocidad de los vientos, así como de los organismos de emergencia de los municipios del sur del Aburrá.
En contraste, el norte de la capital antioqueña siguió presentando un día con un sol intenso, con radiación ultravioleta por los cielos despejados, marcando nuevamente niveles extremos y peligrosos para la salud, sobre todo entre las 11:00 a.m. y la 1:00 p.m.
El Siata anticipó que las lluvias intensas podrían desplazarse en el curso de la tarde hacia la zona noroccidental de Medellín.