Una curiosa propuesta gastronómica en Nueva York generó debate tras la reciente colaboración entre OddFellows Ice Cream Co., una reconocida heladería estadounidense, y Frida, una empresa de productos para bebés.
Se trata de un helado con sabor a la leche materna, producto que rápidamente se convirtió en un fenómeno viral y se agotó a pocos días de su presentación.
El nuevo sabor, disponible únicamente hasta el 10 de agosto en la sede de OddFellows en Dumbo, Brooklyn, no contiene leche materna real, pero busca recrear su sabor.
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“Aunque no está hecho con leche materna, creemos que nuestra receta sabe bastante parecida a la auténtica”, aseguró la empresa en sus redes sociales.
La mezcla está elaborada con leche, crema espesa, leche descremada en polvo, azúcar, huevo y un saborizante de caramelo salado.
También incorpora jarabe de miel y un ingrediente que ha llamado la atención: calostro bovino liposomal, la primera leche producida por las vacas tras el parto, rica en nutrientes y anticuerpos. Su composición es distinta a la de la leche madura.
Según la descripción oficial, se trata de un helado “ligeramente dulce, ligeramente salado, con toques de miel y una pizca de calostro.”. Algunos neoyorquinos que lo probaron lo compararon con el helado de vainilla, aunque más dulce que la leche de vaca común.
Frida, la compañía detrás de la idea, explicó por qué decidió hacer este helado.
“Mientras desarrollábamos nuestro nuevo extractor de leche, nos sumergimos en el mundo de la leche materna. Se habló mucho sobre su sabor y luego la gente empezó a probarla. La leche materna y la fórmula impulsan el desarrollo del cerebro y el cuerpo gracias a una fuente inagotable de grasas, proteínas, carbohidratos, vitaminas y anticuerpos que refuerzan el sistema inmunitario. Así que anunciamos que estábamos desarrollando un postre helado que satisface tus antojos nocturnos”, detallaron.
En redes sociales, el helado ha provocado múltiples reacciones de curiosidad. “¿Es esto una broma?”, “es realmente delicioso, no lo critiques hasta que lo pruebes”, “tengo mucha curiosidad por probar esto, tal vez tenga que pedirlo”, fueron algunos de los comentarios.